¡No grites! ¡No llores!

Hay paz en Jesus...
El mundo no lo entiende.
Con ojos de orgullo, golpeandose el pecho.
Nadie puede entender sin humillarse,
La paz, la fortaleza y la confianza
Que tienen los hijos de Dios.

¡No grites! ¡No llores!
A ti te hablo hijo...
Los fantasmas del pasado que con gritos lloran en tu pecho
Y los suspiros que te hablan diciendote...
Que su nombre es Jesus, solo El te salva.

Recibe su amor con alegria
¿Por que te enfureces?
No seas uno de los enemigos de la corona.
La sangre que lava los pecados
Que no se pueden contar,
Te puede salvar...
¿Por que te enojas? Guarda tu odio.

Que ¿la luz de los ojos ciegos no te deja ver?
O la puerta abierta para los ladrones
¿No te deja entrar?
Las mujeres que te hacian ojos dulces en tu barrio,
Ahora alaban la grandeza de Dios.
¿O acaso tu quizas eres mas fuerte
y mas santo para poder juzgar?
No es la silla donde te sentaste durante tantos años
La que te va a defender frente al gran juzgado de Dios.
Tus hijos y los hijos de tus hijos te van a gritar:
¡Culpable! Y tu ¿Que vas a decir?

Hay paz en Jesus
El mundo no entiende que con amor El subio
A la diestra de su Padre...
Para ti y para mi...
Su sangre es quien nos defiende
Enfrente de los angeles culpables.

Todos gritan: ¡Maranatha!
Pero tu ¿En donde estas?
Ven...Jesus te espera
¡No grites! ¡No llores!


Compus in biserica Mahanaim in Ciudad de Mexico 2004